La OMS (organización mundial de la salud) clasifica a las harinas reinadas como cancerigenas. Afortunadamente en México contamos con una vasta cultura gastronómica y el maíz juega un papel muy importante.
La tortilla de harina carece de varias propiedades en comparación con la de maíz.
No todas las harinas se parecen, algunas pueden ser de maíz o de trigo, lo que se puede señalar es que la composición puede ser alterada. La harina refinada o blanca es la más usada y es la que se puede considerar dañina para la salud. La harina blanca pasa por un procesado industrial en el que se crean partículas más finas y pequeñas al eliminar parte de los componentes fundamentales de la harina, como el salvado, el germen y el endospermo. Los dos primeros son los que se suelen retirar para acabar empleando sólo el endospermo.
México es el principal consumidor de tortilla en el mundo, pues se estima que es consumida por el 94% de la población, por lo que el volumen de producción y consumo es cercano a los 12 millones de toneladas de tortillas por año, lo que representa un porcentaje importante entre los productos alimentarios comercializados en el país.Cabe también señalar que es un alimento de suma importancia en la alimentación de diversos países de Centroamérica.
La tecnología para producir tortilla de maíz nixtamalizado (según el proceso tradicional) es muy antigua; fueron los aztecas quienes trasmitieron este procedimiento de generación en generación, el cual ha perdurado a través de los años. En aquella época, el maíz nixtamalizado era molido en un metate de piedra para producir la masa que se utilizaba para formar discos de aproximadamente veinte centímetros de diámetro, los que se cocían en comales de barro. El producto resultante era llamado tlaxcalli por los aztecas y posteriormente fue bautizado como “tortilla” por los españoles.
Para la elaboración de la tortilla, el maíz tiene que pasar por un proceso de nixtamalización, es decir, cocinar el maíz en agua, con cal. En el cual, el grano absorbe calcio, principalmente; se incrementa el balance de aminoácidos esenciales, así como el valor nutricional a la proteína, haciendo que otros nutrientes se vuelven de fácil asimilación, como el calcio, el fósforo y la fibra; mientras disminuye el ácido fítico, lo que permite la correcta absorción de otros minerales.
Se siguen llevando a cabo diversas investigaciones para tratar de aprovechar las bondades de este exquisito alimento, y asimismo para mejorar su calidad nutricional. Y es que la tortilla de maíz resulta un excelente vehículo para mejorar la calidad nutricia de las poblaciones en las que se incluye la tortilla en la dieta, pero sobre todo para el beneficio de las familias de bajos recursos económicos que tienen por costumbre el consumo de este alimento.
La tortilla es una buena fuente de calcio, indispensable para la contracción muscular; fuente de fibra, que regula la digestión; y de niacina, una vitamina que ayuda en la producción de energía y en el funcionamiento del sistema nervioso.
De acuerdo con la Asociación de Consumidores Orgánicos “la tortilla de maíz es de carbohidratos, pero es baja en sodio y grasa”. Además aporta más nutrientes como proteínas, calcio y potasio.
Gracias a su contenido de vitamina B3 favorece el sistema digestivo, sistema nervioso y beneficia la salud de la piel. También está compuesta por fibra, la cual evita el estreñimiento, quita la sensación de hambre y previene el cáncer de colon y enfermedades cardíacas.
Debido a los hidratos que contiene, la tortilla de maíz puede ayudar a controlar el estrés y la depresión , ya que estimula la hormona serotonina (también conocida como la hormona de la felicidad); además aporta energía al organismo.
La tortilla es ideal para cualquier dieta, ya que una pieza de 30g aporta sólo 70 kcal, brindando energía y evitando la pérdida de masa muscular, pues aporta carbohidratos de lenta absorción, que son necesarios para tener buenas reservas de glucógeno.
SI TE IMPORTA LO QUE COMES, TE DEJO UNA PLATICA MUY INTERESANTE SOBRE LA ALIMENTACIÓN.
Comments